Al participante de GH2011 le jugó en contra haber sido cabecilla del proto motín que los “valientes” quisieron armar en la casa cuando fueron avisados que iban a ser sancionados.
A sus compañeros no les gustó y lo nominaron. A la gente no le gusto y lo eliminó del juego. Y a los panelistas de El Debate, tampoco, y le hicieron sentir el rigor de su pose altanera.
Aunque primero quiso mostrarse arrepentido, Laura Ubfal, Gastón Trezeguet, Sebastián de Caro y las invitadas Amalia Granata y Fernanda Iglesias no le dejaron pasar ninguna de sus contradicciones.
Sobre todo cuando insistía en que no había visto ninguna edición de Gran Hermano, que no había leído el reglamento y que no conocía a Trezeguet, un jugador emblemático del programa.
Leandro quiso enfrentarlo, pero Trezeguet lo dejó mal parado todo el tiempo con sus preguntas, acotaciones y sentencias.
La humildad que ensayó no pudo vencer a la soberbia que lució dentro de la casa.
(teleshow)
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