En el primer llamado, Susana saluda y del otro lado de la línea le contestan:
-Estoy en la cama operada de vesícula y no estoy viendo la tele. ¿Vos estás a esta hora?
-¿Cómo a esta hora? Estamos todos los días a las 9 de la noche. Sandra, te llamo para decirte que ¡te ganaste 100.000 pesos, más una casa fantástica!
-Sí, pero yo estoy en la cama operada de vesícula, y recién vinieron a esta hora y no doy más. Parece que hice 800.000 abdominales.
-Yo sé que te debe doler como loca. ¿Pero estás en el sanatorio o en tu casa?
-Estoy en mi casa, acostada, como en un spa. Mi marido está bañando a los chicos así como si nada. Le pedí al médico que me de licencia de 15 días.
-Más ahora que sos propietaria de una casa y sos dueña de 100.000 dólares… No, pesos, perdón. Todavía no estoy pesificada (risas)... 100.000 pesos para gastar en lo que quieras.
-Cuando me den el alta no sabés. Su, sos divina. ¿Sabés que estás llamando a Puerto Madryn?
-¡Sí, claro!
-La verdad que llamarme para ver cómo me siento es un privilegio, Su.
-Sí, pero yo no te llamé para saber cómo te sentías. Yo te llamé para decirte que te ganaste 100.000 pesos y una casa. Encima que te digo que te mejores.
-¡Me voy a la mierda! Pero la pucha, si me hubieras llamado ayer, ¡me podría haber hecho nueva!
-Te hacías nariz, gomas, todo. Ahora te podés hacer lo que quieras.
-Sí, todo, todo.
-Cuidado por favor. La boca te pido que no, que después quedas como la duquesa de Alba.
Para el segundo llamado la suerte de Susana no fue mejor, pero al menos no se incomodó tanto. Belén, La ganadora del auto 0 kilómetro tampoco estaba viendo y la conductora tuvo que estirar hasta que sintonizara Telefe. Para coronar el día, la otra suertuda de la noche ganó 55.000 pesos además del coche, pero las comunicación se cortó abruptamente.
La propia diva concluyó mirando resignada a uno de los susanos: “¿Qué día hoy, no?”.
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